El gobierno de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, anunció que prepara un incremento de los aranceles a vehículos chinos en México y a otros productos procedentes de ese país. Esta medida se incluirá en la propuesta del Paquete Económico 2026, que será presentada el 8 de septiembre ante el Congreso de la Unión.
El ajuste arancelario no solo impactará a los automóviles importados desde China, sino también a textiles, plásticos y otros bienes que han ganado espacio en el mercado mexicano en los últimos años. Según fuentes cercanas al Ejecutivo, la decisión responde a una doble estrategia: proteger a los productores nacionales y atender la presión de Estados Unidos y de Donald Trump, quien ha insistido en que México limite el ingreso de bienes chinos al mercado norteamericano.
¿Cuál es la situación actual de los aranceles a vehículos chinos en México?
Actualmente, los aranceles a vehículos chinos en México se ubican en 20 por ciento, a lo que se suma un 16 por ciento de IVA.
Aunque existen excepciones y tasas diferenciadas para ciertos productos debido a acuerdos comerciales, la mayoría de los autos chinos pagan este esquema impositivo.
En los últimos años, México se ha convertido en un destino clave para los fabricantes chinos. Entre enero y abril de 2025 se importaron más de 90 mil vehículos desde China, lo que representó un 19.1 por ciento de las ventas nacionales de automóviles. Esta cifra refleja un crecimiento exponencial en comparación con años anteriores, consolidando a China como un jugador central en la industria automotriz mexicana.
Marcas chinas que dominan el mercado mexicano
Las principales marcas que han ganado terreno en México son BYD, MG, JAC, Chirey y Geely, todas con una estrategia basada en precios competitivos, amplias opciones en SUVs y una apuesta creciente por los autos eléctricos.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), las ventas de marcas chinas en México entre enero y julio de 2025 fueron:
- MG Motor: 27,597 unidades.
- JAC: 14,187 unidades.
- Changan: 8,975 unidades.
- Great Wall Motor: 8,424 unidades.
- Chirey: 5,559 unidades.
- Foton: 1,354 unidades.
- Jetour: 195 unidades.
Aunque los números son sólidos, en los últimos meses estas marcas han comenzado a resentir el impacto de las medidas comerciales de Estados Unidos y las expectativas de que México eleve sus impuestos. De hecho, ya se reportó una caída del 11% en las ventas de autos chinos debido al endurecimiento de aranceles por parte del gobierno de Donald Trump.
Riesgos para la industria mexicana de los aranceles a vehículos chinos en México
El crecimiento de las importaciones de autos chinos ha generado preocupación en la industria automotriz mexicana, que advierte sobre una posible desindustrialización y la pérdida de competitividad frente a la entrada masiva de unidades a bajo costo.

Los fabricantes locales argumentan que los vehículos chinos llegan subsidiados por su gobierno, lo que les permite ofrecer precios por debajo de los costos reales de producción. Este escenario, según analistas, amenaza a los productores establecidos en México, incluyendo a gigantes como General Motors, Volkswagen, Nissan y Toyota, que fabrican vehículos para el mercado local y de exportación.
¿Cuánto deberían aumentar los aranceles a vehículos chinos en México?
Hasta ahora, el gobierno de Sheinbaum no ha detallado el porcentaje exacto del incremento en los aranceles a vehículos chinos en México. Sin embargo, distintos especialistas ya han expresado posturas encontradas:
- Jorge Guajardo, exembajador de México en China, asegura que los subsidios distorsionan el mercado y recomienda elevar los aranceles hasta un 70 por ciento, con el fin de frenar la entrada masiva de autos subsidiados.
- En contraste, Eduardo Solís, expresidente de la AMIA, defiende mantener el esquema actual, argumentando que ha favorecido la integración productiva y la exportación de autos fabricados en México.
En abril de 2025, en el Congreso de la Unión ya se discutió la posibilidad de elevar los aranceles a un 25 por ciento, además de aplicar tarifas diferenciadas para baterías de ion-litio y autopartes de alto valor, sectores clave para el desarrollo de la electromovilidad en México.
Impacto para los consumidores mexicanos
El aumento de los aranceles a vehículos chinos en México no solo tendría implicaciones para los fabricantes y distribuidores, sino también para los consumidores. Si los impuestos suben de manera significativa, los precios de los autos importados desde China podrían encarecerse hasta en un 30 o 40 por ciento.
Esto afectaría a los mexicanos que han encontrado en las marcas chinas una opción más accesible frente a los vehículos producidos en Norteamérica o Europa. La consecuencia inmediata sería un incremento en los costos de adquisición y una reducción en la oferta de autos económicos, lo que impactaría a la clase media y baja, principales compradores de estas marcas.
México, entre Estados Unidos y China
El tema de los aranceles a vehículos chinos en México también se inscribe dentro de la disputa comercial entre Estados Unidos y China. El gobierno de Donald Trump ha sido uno de los principales impulsores de que México adopte una postura más estricta contra las importaciones de origen chino, especialmente en el sector automotriz, que está directamente vinculado al T-MEC.
Para México, el desafío es equilibrar las relaciones comerciales con ambas potencias: por un lado, mantener su posición como socio estratégico de Estados Unidos y, por otro, aprovechar las oportunidades de inversión que ofrecen las marcas chinas en sectores como la electromovilidad y la producción de baterías.
El posible aumento de los aranceles a vehículos chinos en México marcará un nuevo capítulo en la política comercial del país. Mientras que para algunos analistas la medida será clave para proteger a la industria nacional, otros advierten que podría generar alzas de precios y un golpe directo a los consumidores.
Lo cierto es que México se encuentra en un momento decisivo: debe definir si apuesta por reforzar su alianza con Estados Unidos y blindar su mercado, o si mantiene una política más abierta hacia China, que ya se ha consolidado como un actor indispensable en la industria automotriz global.
El 8 de septiembre, cuando se presente el Paquete Económico 2026, quedará claro cuál será el rumbo del gobierno de Claudia Sheinbaum frente a la creciente presencia de los autos chinos en México.