La tragedia que ha conmocionado al estado de Washington continúa generando reacciones mientras se intensifica la búsqueda de Travis Caleb Decker, exsoldado del Ejército de EE.UU., sospechoso de estar involucrado en la muerte de las Tres niñas muertas en Leavenworth, quienes eran sus hijas.
El caso, que ha sido ampliamente difundido bajo el titular “Tres niñas muertas en Leavenworth”, ha movilizado a más de 100 agentes en una operación sin precedentes en zonas remotas del Sendero de la Cresta del Pacífico.

Tres niñas muertas en Leavenworth: Las víctimas
Las víctimas, Paityn Decker (9 años), Evelyn Decker (8 años) y Olivia Decker (5 años), fueron encontradas sin vida el 3 de junio en un campamento remoto cerca de Leavenworth, una zona turística conocida por su belleza natural. Las niñas habían sido reportadas como desaparecidas por su madre, Whitney Decker, tras no regresar de una visita con su padre el 30 de mayo.
La Oficina del Sheriff del Condado de Chelan ha confirmado que se han recibido más de 500 pistas del público, y se han cerrado varias zonas de acampada, incluyendo secciones del Bosque Nacional Okanogan-Wenatchee y el Sendero de la Cresta del Pacífico, que conecta Canadá con México.
El gobernador de Washington, Bob Ferguson, ordenó el despliegue de la Guardia Nacional para apoyar con transporte aéreo a las fuerzas del orden en esta operación de búsqueda a gran escala. “El brutal asesinato de estos niños pequeños ha conmocionado a nuestro estado. No descansaremos hasta que se haga justicia”, afirmó en un comunicado.
Decker, de 32 años, fue infante del Ejército y sirvió en Afganistán en 2014. Según documentos judiciales, su salud mental se había deteriorado en los últimos años, y vivía en su camioneta, a veces sin las condiciones adecuadas para el cuidado infantil. La madre de las niñas ya había solicitado limitar las visitas nocturnas del padre por razones de seguridad.
El hallazgo de la camioneta de Decker, con huellas ensangrentadas, en un campamento cerca de Leavenworth, fue clave para localizar los cuerpos de las niñas, quienes presentaban signos de haber sido atadas con bridas. Aún se esperan los resultados forenses que confirmen la causa de muerte.
Las autoridades han advertido que Decker es potencialmente peligroso, aunque no está claro si está armado. Se ha ofrecido una recompensa de hasta $20,000 por información que lleve a su captura.
Este caso también ha reavivado el debate sobre el sistema de Alertas Amber en el estado. Pese a la gravedad de la desaparición, la Patrulla Estatal de Washington no activó una alerta Amber inicial, por considerarla un asunto de custodia sin riesgo inminente. La familia y amigos de las víctimas esperan que esta tragedia impulse mejoras tanto en la emisión de alertas como en el tratamiento de salud mental para veteranos.
Mientras la comunidad llora a las víctimas, se han recaudado más de un millón de dólares en apoyo a Whitney Decker. Amigos cercanos han recordado a las niñas como “alegres, curiosas y llenas de vida”.
El caso “Tres niñas muertas en Leavenworth” sigue en desarrollo, con un llamado urgente a la población para mantener la vigilancia y colaborar con cualquier información que pueda dar con el paradero del sospechoso.